Vamos a enfrentar cultivos hidropónicos vs cultivos convencionales para, comparando los métodos, entender un poco más de qué estamos hablando en cada caso y los pros y los contras de cada tipo de cultivo.
El cultivo hidropónico es un modo de agricultura en el que se prescinde de uno de los elementos más importantes: el suelo cultivable. En lugar de enraizar los cultivos en un suelo enriquecido con los minerales y nutrientes que la planta necesita para crecer, se colocan las raíces en un tubo en el que o bien hay directamente agua en la que están disueltos dichos nutrientes o bien hay una capa de sustrato tipo arenilla junto a esta agua.
Entre las ventajas de estos cultivos está, para empezar, que no hace falta tierra. Pueden instalarse invernaderos en cualquier lugar con independencia del tipo de suelo sin necesidad de transportar tierra para plantar.
Si se combina la agricultura hidropónica con el uso de invernaderos, el clima deja de ser un factor determinante en la agricultura pudiendo convertir prácticamente cualquier lugar en un cultivo.
Dado que no es necesario un suelo para trabajar, estos cultivos pueden situarse en diferentes alturas, aprovechando no el largo y el ancho del invernadero o del espacio para cultivar, sino también el alto del mismo. Esto permite multiplicar la cantidad de plantas que se pueden hacer crecer en un mismo lugar.
Al no hacer falta suelo cultivable se pueden organizar fácilmente huertos urbanos de cultivo hidropónico, incluso en la terraza de una vivienda o en la azotea de un edificio. Solo es necesario realizar la instalación, la cual no es especialmente costosa ni sofisticada.
Los cultivos convencionales son la forma tradicional de agricultura en la que existe un suelo cultivable que se trabaja y en el que se planta para enraizar los diferentes tipos de cosechas.
La agricultura convencional se puede combinar también con invernaderos para no depender tanto del clima exterior, pero siempre va a depender de un suelo adecuado para el tipo de cultivos que se quieren trabajar en él.
La principal ventaja de los cultivos convencionales es que, si se realizan en un lugar en el que el suelo es adecuado y no es necesario realizar grandes inversiones en tierra, no necesitan más infraestructura que el invernadero si se opta por su utilización.
Esto es a grandes rasgos lo primero que vemos en un enfrentamiento cultivos hidropónicos vs cultivos convencionales. Los cultivos hidropónicos son por ahora mucho menos conocidos pero en este blog esperamos ir descubriendo poco a poco todos sus usos y posibilidades.